Tuero
El tuero es una encina grande y seca que puede encontrarse en los alrededores de la localidad y que los quintos de cada año la eligen por su hermosura y la trasladan al pueblo para ser quemada en la noche del 24 de diciembre, Nochebuena.
Antiguamente, los Quintos eran los chicos jóvenes que al año siguiente se iban a la mili y era su último verano antes de irse. Hoy en día, los Quintos son tanto chicos como chicas de 17 años y que, como se suele decir, ese año será su verano especial.
Para todos los Quintos, es un verano único que no se vuelve a repetir. Desde niños tienen la ilusión de participar en esta tradición de la localidad y ven como, cada año, ese verano llega a su vida para celebrarlo lo mejor posible.
La tradición consiste no solo en cortar la encina si no también en organizar actividades para el pueblo, ayudar ese año en las fiestas… También cantan canciones antiguas por el pueblo mientras que con una manta o cortina que ellos eligen de un vecino/a piden dinero por los bares celebrando la traída del tuero.
Las fechas a destacar de esta tradición son:
– El 25 de julio se elige y se desprende de la tierra.
– El 15 de agosto es trasladado y colocado en la plaza.
– El 24 de diciembre, una vez bien arropado con taramas, al caer la tarde, se le prende fuego.
El día de Nochebuena, cuando acaba la misa, los Quintos le prenden fuero mientras que los vecinos y vecinas de la localidad se juntan alrededor de la hogura para cantar o simplemente contemplar la fantástica imagen de esa noche navideña.