Esta etapa de unos 9 kilómetros conecta Cañaveral con Grimaldo, presentando un desnivel acumulado de 247 metros. Diseñada para bicicletas de gravel, tiene una dificultad fácil a pesar de sus subidas constantes y algunos tramos técnicos que requieren buen control sobre el terreno.

El recorrido transcurre por caminos rurales y senderos entre olivares y encinares típicos de la comarca, ofreciendo un paisaje natural muy atractivo y tranquilo. El firme, mayormente de tierra compactada, es adecuado para gravel pero exige atención en las zonas más irregulares o con piedras sueltas.

Esta etapa es perfecta para ciclistas que buscan combinar naturaleza, esfuerzo y cultura en un tramo corto.

Esta etapa de aproximadamente 9 kilómetros une Grimaldo con Cañaveral y tiene un desnivel positivo de 134 metros. Diseñada para bicicletas de gravel, se considera de dificultad fácil, ya que aunque cuenta con algunas subidas suaves, el trazado general es cómodo y transcurre por pistas bien compactadas.

El recorrido atraviesa paisajes típicos del norte extremeño, con dehesas y zonas de matorral mediterráneo. El entorno tranquilo y poco transitado hace que esta etapa sea muy agradable, ideal para disfrutar del entorno sin demasiadas exigencias técnicas o físicas.

Esta etapa es perfecta para una jornada corta o como parte de una transición entre tramos más exigentes de la Ruta Vía de la Plata.