Iglesia Parroquial Divino Salvador
Tiene planta rectangular y una nave dividida en cinco tramos por arcos fajones apuntados; el acceso a la capilla mayor se realiza por arco de medio punto. Los muros están construidos en mampostería y los contrafuertes de ladrillos mientras que los sillares se han utilizado solo en el interior del templo.
El tejado es a dos aguas y la última línea de tejas está sostenida por canecillos. Las primeras referencias históricas datan de 1494, fecha en que la Orden de Santiago visita el templo y nos proporciona la siguiente descripción: «la capilla es fecha de bóveda y el cuerpo de la iglesia de tres naves. La nave del medio sobre cinco arcos de un cabo e otro, cubierta de madera tosca e cañas e teja vana… las otras dos naves están cubiertas de madera tosca e caña… a un lado de la dicha iglesia está una pila de bautizar y un campanario fecho de nuevo de cal e canto».
Según esta referencia, y de acuerdo con la tipología de los nervios de la capilla mayor, podemos deducir que fue construida en el siglo XV. Este tipo de bóveda, sencilla y de rudos nervios, la encontramos en bastantes capillas mayores de templos de la Baja Extremadura como las de Los Santos de Maimona o Arroyo de San Serván. En 1494, el templo es de tres naves y con cubierta de madera y caña, con lo que podemos afirmar que la nave actual fue construida en la primera mitad del siglo XVI, ya que en 1576 la iglesia está totalmente terminada.
RETABLO MAYOR
A finales del siglo XV o tal vez a comienzos del XVI, el pintor Antón de Madrid, residente en Zafra en aquel tiempo, pintó nuestro precioso retablo de la iglesia parroquial del Divino Salvador. El autor gozó de merecido prestigio en su época y prueba de ello fueron los múltiples encargos que recibió de las autoridades eclesiásticas de la provincia de León, Orden de Santiago, que hasta 1875 ocupaba gran parte del territorio extremeño.
En 1982, este retablo fue declarado Monumento Histórico Artístico y poco después la Consejería de Cultura acometió un profundo trabajo de restauración.
Consta, el retablo, de veintiocho tablas, distribuidas en tres cuerpos y once calles verticales, que recrean la vida de María y de Cristo, formando un cuadro didáctico destinado al aleccionamiento de los fieles
Este retablo es uno de los conjuntos más importantes de la pintura tardomedieval conservada en Extremadura y una muestra significativa del gótico tardío y de las primeras expresiones del Renacimiento. La tabla reproducida a la izquierda muestra la visita que realiza María a su prima Isabel después de la Anunciación.. Habida cuenta de las fechas en que nos encontramos, la obra resulta algo arcaica y posee, no pocas, distorsiones de perspectivas.