La etapa entre Cuadros y La Pola de Gordón, con 216 metros de desnivel positivo y una longitud de aproximadamente 23 km, es una etapa difícil. Se trata de una jornada que combina tramos de grava y carretera secundaria, con un perfil ascendente constante y varios puntos que requieren especial atención, especialmente en la salida a la LE-4514, donde la visibilidad es reducida y el tráfico puede ser rápido. 

El recorrido atraviesa un entorno montañoso característico del norte leonés, con paisajes de robledales, pinares y pequeños valles fluviales. El terreno es variado y exige un esfuerzo sostenido, aunque sin grandes rampas. A lo largo del camino, se suceden pequeños pueblos y áreas rurales donde es posible realizar paradas breves, aunque los servicios son limitados. El entorno natural y la tranquilidad del trayecto hacen que, a pesar de su dificultad, esta etapa sea muy gratificante para los amantes del gravel. 

Al llegar a La Pola de Gordón, el ciclista entra ya en plena montaña leonesa, lo que marca una transición clara en el paisaje de la Ruta Vía de la Plata. Esta localidad ofrece servicios básicos, además de la posibilidad de disfrutar de su ambiente tranquilo y de su interesante entorno geológico y natural, ideal para una pausa o para pernoctar antes de continuar hacia etapas de mayor altitud. 

La etapa entre La Pola de Gordón y Cuadros, con 138 metros de desnivel positivo y una distancia aproximada de 23,5 km, presenta una dificultad moderada y discurre en sentido descendente a través del paisaje montañoso del norte de León. El terreno requiere atención constante, ya que alterna entre tramos de pista compactada, carretera secundaria y caminos rurales. 

El entorno natural es uno de los grandes atractivos de esta etapa, con vistas a valles estrechos, formaciones geológicas y bosques de montaña. El descenso se realiza de forma progresiva, permitiendo disfrutar de la ruta con mayor fluidez, aunque hay que prestar especial atención a la incorporación a la LE-4514, que puede resultar peligrosa por la baja visibilidad y la velocidad de los vehículos. 

A medida que se avanza hacia Cuadros, el paisaje se va abriendo y suavizando, permitiendo una entrada más cómoda en esta localidad, que marca el límite con la zona más montañosa del itinerario. Esta etapa es ideal para tomarse con calma, disfrutar del entorno y prepararse para los tramos más llanos del sur de la provincia.