Iglesia de «El Salvador»
La primera iglesia de “El Salvador” estuvo situada en el testero sur de la plaza de San Fernando. Era un templo parroquial mudéjar, que en el siglo XVIII estaba en estado de ruinoso.
Tras la expulsión de los jesuitas, la iglesia del Colegio de San Teodomiro quedó libre, se optó entonces por demoler la antigua parroquia y trasladarla a este templo de mayor tamaño y construcción más reciente.
En 1620, la comunidad jesuita de Carmona había obtenido autorización para fundar colegio e iglesia. Para ello, compraron unas viviendas cerca de la iglesia de Santa María, donde construyeron su primitivo conjunto de iglesia y colegio.
En 1701 se inician las obras de los nuevos edificios con el diseño del arquitecto Pedro Romero, que son los que se mantienen en pie hasta hoy en día.
El templo se organiza interiormente según una planta de cruz latina de tres amplias naves, la mayor es la más alta y está cubierta con una bóveda de cañón con lunetos, las laterales de menores dimensiones con bóvedas de arista. Sobre el crucero se eleva una majestuosa cúpula sobre tambor, decorada con imágenes de los evangelistas y rematada por linterna.
El retablo mayor del siglo XVIII realizado por el maestro carmonense José Maestre, muestra en la hornacina principal una imagen del Divino Salvador.
Exteriormente cuenta con dos imponentes portadas realizadas en un barroco clasicista de porte noble, en ellas intervino el maestro Francisco Gómez Septién. La principal, situada a los pies de la nave central, abre a la plaza de Cristo Rey y la otra lateral, situada en la nave de la Epístola, da a la calle Salvador.
En el ángulo noroeste puede verse el comienzo de la torre, con un cuerpo de campanas que no llegó a terminarse.