Se encuentra al nordeste de Mérida, a 15 km., en el Parque Natural de Cornalvo. La presa, de menores dimensiones que la de Proserpina, se sitúa entre dos lomas, cerrando así el espacio donde se acumularían las aguas. Hacia la mitad del muro de contención y dentro de las aguas embalsadas, se sitúa la torre de captación, encargada de regular el flujo de salida. Al igual que la de Proserpina, posee un corazón de hormigón revestido de bloques graníticos. La parte interior de la presa, en contacto con el agua, tiene también forma escalonada, si bien aquí es más marcada que en el caso de Proserpina, llegando a simular unas gradas. La parte exterior está, igualmente, reforzada por un talud de tierra.
Mientras la altura del muro es similar a la de Proserpina (18 metros), su longitud es la mitad (220 metros), contando con una anchura, en su parte más elevada, de más de 3 metros.

Una inscripción conservada en el Museo Nacional de Arte Romano recuerda que la obra fue realizada en época augusta.