Colegio Nuestra Señora del Carmen
El Colegio de Nuestra Señora del Carmen es uno de los colegios fundados por congregaciones religiosas a finales del siglo XIX en Villafranca. En concreto, la llegada de las hermanas carmelitas se produce en 1897.
La primera ubicación del colegio fue la casa de los Solís en la calle Hernán Cortes, que previamente también había servido de sede al colegio jesuíta. Con el aumento de alumnas, la congregación decidió trasladar el convento a unas casas de la actual calle Santa Joaquina, donde permanecieron hasta mediados del siglo XX.
Con el crecimiento demográfico de Villafranca y ante la continua llagada de alumnas internas, en 1954 se decide adquirir las antiguas casas del Marqués de Lorenzana en la calle Alzada. Debido al estado en el que se encontraba la propiedad, la congregación encargó al arquitecto sevillano Aurelio Gómez Millán el proyecto del nuevo colegio. De esas obras surgió el actual edificio, presidido por su fachada principal donde destaca la superposición de varias arquerías. El conjunto se culmina con el escudo de la orden y el remate en pináculos tan característico del arquitecto sevillano.
El edificio se articula en torno a un patio central que cuenta con claustro. En su interior uno de los espacios de mayor relevancia es la capilla inspirada en los nuevos estilos arquitectónicos con predominio de las líneas rectas.
Actualmente, el colegio es un centro educativo que abarca desde la educación infantil hasta bachillerato.