La etapa entre San Martín del Camino y León, de aproximadamente 26 km y con un desnivel acumulado de 176 metros, representa un tramo difícil, especialmente por la proximidad al entorno urbano y algunos tramos que requieren mayor atención. 

El itinerario transcurre por caminos de grava y zonas asfaltadas, atravesando pequeñas localidades del entorno leonés. A medida que se avanza hacia la ciudad, el entorno rural va dejando paso a paisajes más urbanos, lo que conlleva un aumento del tráfico y la necesidad de estar atentos a las intersecciones. Uno de los puntos más delicados se encuentra antes de llegar a La Virgen del Camino, donde las salidas del carril bici interurbano pueden resultar peligrosas por su diseño y visibilidad reducida. Se recomienda extremar la precaución en este tramo. 

La llegada a León, con su imponente catedral gótica y su casco histórico lleno de vida, supone una recompensa tanto cultural como turística. La ciudad cuenta con todos los servicios necesarios para el ciclista, y es una excelente oportunidad para descansar, reponer fuerzas y disfrutar del patrimonio local. Esta etapa, aunque exigente, combina la experiencia del ciclismo en entornos variados con el atractivo de llegar a una de las grandes ciudades de la ruta. 

La etapa entre León y San Martín del Camino, con una distancia aproximada de 25,5 km y un desnivel acumulado de 221 metros, se clasifica como de dificultad fácil, ideal para quienes buscan una jornada más relajada , aunque no exenta de atención en ciertos puntos. 

La salida de León se realiza en un entorno urbano, con tramos de carril bici y calles con tráfico moderado. A medida que se abandona la ciudad, el entorno se va volviendo más tranquilo y rural. Sin embargo, al pasar por La Virgen del Camino es necesario extremar la precaución, especialmente en las salidas del carril bici interurbano, que pueden presentar cierta peligrosidad por su configuración y cruces poco visibles. 

El recorrido avanza sin grandes complicaciones técnicas, discurriendo por caminos de grava y tramos asfaltados en buen estado. Esta etapa es perfecta para disfrutar del paisaje y avanzar con buen ritmo sin exigencias excesivas.