Abierto muy cerca de la iglesia de San Isidoro, el Portillo de la Traición, hoy Portillo de la Lealtad (también conocido como portillo de Arena), es un simple arco de medio punto que forma parte del primer recinto amurallado de la ciudad de Zamora.

El portillo está vinculado con la leyenda del regicidio de Sancho II de Castilla a cargo de Bellido Dolfos, noble leonés del siglo XI que aprovechó un apretón del monarca para lanzarle un dardo mortífero, siendo después perseguido por el Cid.

Sin embargo, no existe constancia real de semejante hecho, a lo sumo glosas de romancero enhebradas en prodigiosa oralidad y muy trastabilladas en época romántica.

En 2010 el Portillo de la Traición cambió su nombre por el de Portillo de la Lealtad.