Esta etapa enlaza Santa Marina del Rey con León a lo largo de un trayecto de poco más de 33 kilómetros, siguiendo carreteras secundarias que atraviesan paisajes rurales del centro leonés. El perfil es suave y progresivo, sin grandes rampas ni dificultades técnicas, lo que la convierte en una opción ideal para ciclistas que buscan disfrutar del entorno sin exigencias físicas elevadas. La baja densidad de tráfico en la mayoría del recorrido permite pedalear con tranquilidad, atravesando pequeños núcleos rurales y zonas agrícolas.

A medida que se aproxima a la capital leonesa, el entorno se vuelve más urbano, y la ruta se integra con el trazado ciclista de la ciudad. En este tramo final se hace uso de carriles bici bien señalizados, que permiten entrar en León de forma cómoda y segura, evitando en lo posible las vías más transitadas. Sin embargo, es importante mantener la atención, ya que muchos de estos carriles cruzan avenidas y calles mediante pasos ciclistas habilitados que, aunque señalizados, requieren precaución debido al flujo constante de vehículos.

León, como ciudad histórica y final de esta etapa, tiene como origen el campamento romano de la Legio VII y ofrece una gran riqueza cultural y patrimonial. La llegada permite al ciclista disfrutar de monumentos como la Catedral, La Real Colegiata de San Isidoro o los animados barrios Húmedo y Romántico, ideales para reponer fuerzas. Además, León es un importante punto de conexión para quienes recorren la Ruta Vía de la Plata, brindando servicios, talleres y alojamiento para cicloturistas.

Esta etapa parte de la ciudad de León, conectando con Santa Marina del Rey tras algo más de 33 kilómetros de recorrido por carreteras secundarias. Desde el centro urbano, la salida se realiza mediante tramos de carril bici bien acondicionados que permiten abandonar la ciudad de forma progresiva y segura. No obstante, es importante prestar atención durante los cruces habilitados para ciclistas, ya que el tráfico de vehículos puede ser intenso en determinadas zonas, especialmente en horas punta.

El recorrido se desarrolla en su mayoría por un entorno rural tranquilo, caracterizado por campos de cultivo, suaves colinas y pequeños pueblos leoneses. La pendiente general es muy llevadera, aunque en esta dirección se acumula algo más de desnivel, con tramos ondulados que aportan algo más de esfuerzo físico sin presentar grandes dificultades técnicas. Las carreteras por las que transcurre son poco transitadas, lo que contribuye a una experiencia de pedaleo cómoda y agradable.

La llegada a Santa Marina del Rey supone un descanso merecido en un entorno apacible.