Aldea del Cano se incorpora a la Red de Cooperación de Ciudades en la Ruta de la Plata
Los municipios a lo largo del recorrido de este atractivo itinerario, poseedor de una riqueza natural excepcional, atesoran un importante legado histórico, artístico y cultural.
El municipio de Aldea del Cano (Cáceres) se ha incorporado a la Red de Cooperación de Ciudades en la Ruta de la Plata, una asociacion voluntaria y sin ánimo de lucro, como asociado de pleno derecho. Con esta nueva adhesión son ya 28 las localidades que suman esfuerzos para poner en valor los recursos turísticos, históricos, culturales y gastronómicos de las poblaciones por las que atraviesa este histórico itinerario, ayudando así a dinamizar su economía y desarrollo.
Constituida por localidades ubicadas en la denominada Ruta Vía de la Plata y en su área de influencia, el objetivo de esta Red de Cooperación no es otro que la actuación conjunta en la defensa y promoción de este atractivo itinerario, heredero de un importante legado histórico, artístico y cultural, y poseedor de una riqueza natural excepcional.
El patrimonio histórico de Aldea del Cano lo conforma un conjunto vario de construcciones entre las que destaca la iglesia de San Martín, que data de los siglos XV-XVI, y la ermita de la Virgen de los Remedios, muestra de la arquitectura religiosa y popular de la zona; el castillo de Mayorazgo, el convento de Angelita Llorens o el palacio de los marqueses Martín Borrego. En los alrededores de esta localidad cacereña se encuentran, además, numerosos restos de castros y villas romanas e inscripciones sepulcrales, prueba de su pasado romano. El origen del pueblo de Aldea del Cano, que también se llamó Aldehuela, parece ser que se debe a los romanos, aposentados en aquellos lugares, cuando Octavio Augusto fundó Mérida.
Esta localidad cacereña, localizada en plena Vía de la Plata, alberga un combinado perfecto de historia, naturaleza y tradición. En sus calles el viajero encontrará y disfrutará el encanto de un pequeño pueblo tranquilo, cuya proximidad a la Sierra de San Pedro, a las dehesas del Parque Natural de Cornalvo, a varios embalses y a un humedal declarado Zona de Especial Protección para las Aves lo convierte en lugar idóneo para disfrutar de unos días de descanso entre miliarios y restos de arquitectura romana en contacto con la naturaleza. Los amantes del turismo activo, podrán disfrutar de distintas rutas de senderismo en las que descubrirán la localidad y su entorno.
Entre sus costumbres y tradiciones: el tuero, los quintos, la romería de la Virgen de Fátima, las fiestas en horno a San Martín y a la Virgen de los Remedios, la rosca del Calvario, producto que se regala a los ahijados el domingo antes de Ramos, y el ramo.