Ubicación y concejos limítrofes
Con una superficie de 106,97 Km2, el Concejo de Llanera está situado en el centro de Asturias, bordeado por los concejos de Illas, Gijón y Corvera al norte, Gijón y Siero al este, Oviedo al sur e Illas y Las Regueras, al oeste.
Extensión, población y parroquias
Llanera se compone de 11 parroquias, que ofrecen diferentes paisajes físicos y humanos en función de las actividades económicas que en ellas se realizan.
No existe un único núcleo urbano centralizador, más bien dos importantes Posada y Lugo que tienen como característica común la implantación sobre importantes ejes de comunicación y una estructura lineal en su asentamiento.
Seguidamente estaría Villabona, un típico asentamiento minero y la urbanización de Soto de Llanera que representa el modelo de los nuevos hábitos urbanos.
En cuanto a los núcleos rurales, apenas incide el creciento residencial, se da toda una gama de tipologías más o menos alteradas por renovación de la vivienda y el aumento del dominio edificado; desde las pequeñas agrupaciones de caserías y quintanas formando aldeas hasta asentamiento disperso e intercalar de caserías aisladas. Su localización sobre fondos de valle y laderas de suave pendiente, dejan siempre libres las vegas y mejores tierras, destinadas a terrazgo de explotación.
Parroquias:
Ables, Arlós, Bonielles, Cayés, Ferroñes, Lugo, Pruvia, Rondiella, San Cucufate, Santa Cruz y Villardeveyo.
Relieve, hidrografía y vegetación
Alrededor del 95% de la superficie se encuentra por debajo de los 400 m de altitud; tan sólo algunas serranías aisladas, como la de Santofirme y el Águila superan esta cota, teniendo como punto más elevado el Pico Gorfolí (617 m.) en el límite municipal con Illas, mientras que el río Nora, que recorre sus límites más meridionales, representa el punto más bajo (120 m.).
La red hidrográfica, es densa y de corto recorrido. Por el sur arroyos de escasa acción, alimentan el Nora mientras, que por el norte, la red desagua en el mar.
De la vegetación, destaca el predominio del prado y el matorral en sustitución del bosque autóctono, aunque todavía quedan manchas en los fondos de valle y cursos de agua. En las riberas de los ríos y arroyos, se mantienen hileras o galerías de alisos, olmos y sauces.
Climatología
El clima de Llanera puede definirse como de carácter templado, con una temperatura media que no supera los 20º y suaves oscilaciones de las medias anuales, entre las máximas y las mínimas temperaturas.
La pluviosidad por su parte, se sitúa ente 900 y 1150 mm/año con una distribución bastante regular.
Su localización y orografía han sido determinantes para el desarrollo de este territorio.
Se tiene constancia de presencia humana desde el Paleolítico Inferior y Medio, como prueban materiales arqueológicos aparecidos en el territorio. Hallazgos de túmulos en diversas zonas; Ortal, parroquia de Pruvia, y en La Cobertoria. La presencia de poblados en Época Neolítica parece cobrar fuerza, sobre todo, después de haber cubierto importantes emplazamientos castreños: La Coroña, en Ferroñes; Peña Menende, en Bonielles; El Canto de San Pedro, en Lugo; El Cueto, ente Lugo y Villardeveyo, cerca de Caravies; y el Pico Cogolla, en Severies, parroquia de Rondiella claves para concretar la ubicación «Lucus Asturum» principal centro administrativo de la Asturias transmontana, encrucijada de caminos, lugar de paso y asentamiento. Las excavaciones posteriores hallaron en uno de los muros de la Iglesia de Santa María un ara dedicada a los Lares Viales( divinidades romanas).
La etapa de feudalismo se caracterizó por los intereses continuos de la mitra ovetense sobre el territorio de Llanera. La administración de la tierra, que en estas fechas suele asociarse a las Regueras, era asignada por el prelado ovetense a un encomendero, generalmente representante del estamento nobiliar.
Es en esta época cuando tiene lugar el episodio más representativo del concejo: Los «agravios y sinrazones» que soportaban «por alguno de los encomenderos de don Guillén» (obispo de Oviedo) dio lugar a una abierta rebeldía antiseñorial protagonizada por los vecinos del concejo, quienes recibieron el nombre de los perxuraos (exconxuraos ) de Llanera. La importancia de la Edad Media, queda patente en el legado heredado tanto civil como religioso.
Como lugar estratégico se puede decir que, era trazado obligatorio de varias rutas comerciales.
Ya en el siglo XIX, como consecuencia de un incipiente proceso industrializador del territorio empieza a modelarse como se presenta hoy en día. En la década de los cuarenta, se explotan las minas de Ferroñes. Los acontecimientos de la primera industrialización se concentran en la segunda mitad del siglo. Aprovechando los yacimientos de arcilla existentes, se establece en Coruño, la Tejería Mecánica, una fábrica de ladrillos, más adelante surgió “Cerámicas Guisasola”.
Los años sesenta suponen el inicio del segundo proceso industrializador de Llanera, aquel que le ha conferido alguno de los aspectos que en la actualidad caracterizan su peculiar evolución local. En 1963 se inaugura el polígono industrial de Silvota. Más tarde, un segundo polígono, el de Asipo, esta vez de iniciativa privada. Los espacios libres de este último sirvieron para el establecimiento de Mercasturias (mercado al por mayor de productos del sector de la alimentación) y del Parque Tecnológico como centro de servicios.
El contraste con la concentración que supone la masificación en la gran ciudad, el anonimato asociado a ella, la rapidez de los cambios, la ausencia de valores de referencia que simbolizan «el progreso» hacen, que muchos ciudadanos, consideren este territorio, como lugar ideal de residencia, donde las riquezas naturales y las estructuras sociales de acogida no dejan de sorprender a los nuevos pobladores, constituyendo motivo de orgullo para los lugareños.
Su importante patrimonio histórico- artístico, la existencia de una rica y variada gastronomía, la celebración de fiestas y ferias de larga duración, las buenas condiciones para la práctica de deportes y la existencia de núcleos y colectivos especialmente dinámicos, hacen que Llanera, ocupe un lugar privilegiado en el mapa del territorio asturiano. Sus equipamientos, infraestructuras e instalaciones están al servicio de todos los que nos visiten.